Robert Pires anunció este jueves, a sus 42 años y tras uno alejado de los terrenos de juego, que se retira de la práctica del fútbol, lo que le convierte en el último campeón del mundo de 1998 en hacerlo.

"Tengo 42 años y en algún momento hay que parar, hay que dejar espacio a los jóvenes", aseguró el futbolista en la televisión "BeIN Sports", en la que desde hace meses es uno de sus comentaristas.

Su última experiencia profesional se desarrolló en el Goa FC indio en el otoño de 2014 y, posteriormente, fue contactado por el Villarreal, club en el que ya militó entre 2006 y 2010.

"Con mi esposa nos habíamos fijado como objetivo acercarnos a Londres y al Arsenal, que es el club más importante de mi carrera (...) Veremos lo que sucede en los próximos meses una vez más con ese club", afirmó el futbolista, que dejó así abierta la puerta a integrar, en algún puesto, la formación "Gunner".

Formado en el Reims, Pires dio el salto a la primera división de la mano del Metz, donde jugó entre 1992 y 1998, año en el que ganó el Mundial disputado en su país.

De ahí dio el salto al Olympique de Marsella, donde pasó dos temporadas y jugó una final de la Copa de la UEFA, lo que le sirvió de trampolín para fichar por el Arsenal junto con su cómplice Thierry Henry.

Antes, en la final de la Eurocopa de 2000, fue el autor del pase decisivo para que David Trezeguet marcara el tanto contra Italia en la prórroga, un "gol de oro" que dio a Francia su segunda victoria continental.

Dos ligas y dos Copas de Inglaterra son sus principales méritos con los "Gunners", con quienes perdió la final de la Liga de Campeones de 2006, tras la cual fichó por el Villarreal.

Tras un paso por el Aston Villa y su experiencia india, Pires se alejó de los terrenos de juego que ahora anuncia abandonar de forma definitiva.

EFE